Page 21 - BUENA LETRA, digital

¿Arde en ti la vocación de escribir
con la intensidad del fuego que consume?

Carta abierta a
un joven
escritor

Por Luis Bernal Lumpuy

Agradezco la confianza en mis consejos acerca
de tus inclinaciones literarias. Me anima saber
que hay jóvenes cristianos que desean servir a
los demás mediante la página impresa.
Te prometo mi ayuda, y dedicaré tiempo para respon-
der a tus preguntas, revisar tus manuscritos y poner a tu
disposición mi experiencia como escritor y corrector de
estilo.

Te escribe alguien que se esfuerza como tú por realizar
un buen trabajo en el arte de la palabra escrita.

Tal vez te lleve algunos años de ventaja, pero sigo en el
proceso de aprendizaje.Así que te contaré de los aciertos
y desaciertos en mi trabajo, y de los pequeños éxitos y
de los fracasos que me han ayudado a través de los años.

Quiero primero preguntarte: “¿Arde en ti la vocación
de escribir con la intensidad del fuego que consume?”.
Pregunto porque a veces lo que mueve a una persona a
escribir es el deseo de llegar a ser alguien, de sobresalir o
de brillar. Si es así, todo el esfuerzo culminará en fracaso
y decepción. Es necesario que haya algo más profundo y
permanente en el alma del que aspira a ser escritor: la
ardiente vocación de expresar gráficamente las ideas.

Algunos piensan que escribir es un entusiasmo pasa-
jero. Hasta se dice que la literatura es el refugio de las
almas solitarias, propensas a la catarsis, o a confesiones
mediante emociones estéticas. Sin embargo, la vocación
genuina es una pasión dominante que va más allá del efí-
mero entusiasmo.

Si consideras que tienes vocación por el arte de escribir,
y deseas emprender la carrera de las letras, debes iniciar

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